Tragedia en el teatro musical mexicano
La comunidad teatral nacional sufre la inesperada pérdida de Hiromi Hayakawa, talentosa intérprete que alcanzó reconocimiento por su participación en el exitoso montaje ‘Mentiras’.
La artista, que dejó este mundo a los 34 años, se había consolidado como una figura fundamental en las tablas nacionales gracias a su versatilidad actoral y su poderosa voz. Su participación en el reality show ‘La Academia’ fue el trampolín que le permitió incursionar en el teatro musical con éxito rotundo.
Legado en escena y relevancia en redes
El reciente estreno de la adaptación televisiva de ‘Mentiras’ en Prime Video reavivó el interés por la trayectoria de esta destacada actriz, trayendo nuevamente a colación el trágico episodio de su fallecimiento.
Entre los papeles más significativos de su carrera, destaca su participación en ‘Mentiras, el musical’ donde dio vida a los personajes de Daniela, Dulce, Yuri y Lupita, logrando un récord poco común al interpretar exitosamente los cuatro roles protagónicos de la obra.
Trágico desenlace y controversia médica
La causa de su deceso se remonta a una complicación durante su embarazo que derivó en un cuadro clínico crítico. Un familiar cercano describió el lamentable suceso con estas palabras:
“Se le colapsó el hígado y la niña no recibió oxígeno (…) Nació muertita, se le murió a ella adentro”
El diagnóstico médico confirmó que Hiromi enfrentaba el complejo Síndrome de HELLP, caracterizado por alteraciones en las plaquetas sanguíneas, elevación de enzimas hepáticas y desintegración de glóbulos rojos. Los síntomas incluyen fatiga extrema, visión borrosa, dolores de cabeza intensos y riesgo de convulsiones, condiciones que pueden agravarse rápidamente poniendo en peligro a madre e hijo.
Homenaje de un compañero de escena
Carlos Rivera, exintegrante de ‘La Academia’ y ex pareja sentimental de Hiromi, expresó públicamente su dolor por la pérdida de quien consideraba una inspiración artística fundamental:
“Poca gente sabe que tú fuiste la culpable de que me enamorara del Teatro Musical; tú me mostraste lo maravilloso que era y me llevaste a ver mi primera obra, lo demás es historia. Gracias eternamente por eso. Tu disciplina y pasión siempre fueron tu sello y vi con orgullo como te convertiste merecidamente en una estrella imprescindible de la escena teatral mexicana”